¿Qué establece el Decreto-Ley 36/2025?
Este decreto, publicado en la Gazzetta Ufficiale, introduce el artículo 3-bis en la Ley n.º 91/1992, limitando el reconocimiento automático de la ciudadanía italiana por descendencia a solo dos generaciones: hijos y nietos de italianos nacidos en Italia. Los descendientes de generaciones posteriores, como bisnietos, ya no tienen derecho automático a la ciudadanía.
Además, el decreto tiene efecto retroactivo, afectando incluso a personas nacidas antes de su publicación que aún no han solicitado la ciudadanía. Esta retroactividad ha generado críticas por considerarse una violación al principio jurídico de irretroactividad de la ley.
¿Qué es un decreto-ley en Italia?
En el sistema jurídico italiano, un decreto-ley es una medida provisional adoptada por el gobierno en casos de urgencia o necesidad. Entra en vigor inmediatamente, pero debe ser aprobado por el Parlamento en un plazo de 60 días para convertirse en ley definitiva. Durante este período, el Parlamento puede modificarlo, aprobarlo o rechazarlo.
¿Qué cambia con este decreto?
Antes del decreto, la ciudadanía italiana podía ser transmitida sin límite generacional, siempre que se demostrara la descendencia de un ciudadano italiano. Con la nueva normativa:
- Solo los hijos y nietos de italianos nacidos en Italia tienen derecho automático a la ciudadanía.
- Los descendientes de generaciones posteriores deben demostrar un vínculo efectivo con Italia.
- Se elimina el reconocimiento automático para descendientes nacidos en el extranjero.
- Los procesos de solicitud se centralizarán en una oficina especial en el Ministerio de Asuntos Exteriores, dejando de ser competencia de los consulados.
¿Qué dice la ley original?
La Ley n.º 91 de 1992 establece que la ciudadanía italiana se transmite por ius sanguinis, es decir, por descendencia, sin limitar el número de generaciones. El nuevo decreto modifica este principio, restringiendo el derecho a sólo dos generaciones y exigiendo vínculos efectivos con Italia para generaciones posteriores.
¿Por qué se cuestiona este decreto?
El decreto ha sido objeto de críticas por varias razones:
- Retroactividad: Aplicar la ley a personas nacidas antes de su promulgación se considera una violación al principio de irretroactividad del derecho.
- Derechos adquiridos: Se argumenta que la ciudadanía es un derecho adquirido desde el nacimiento y no puede ser revocado retroactivamente.
- Falta de urgencia: Se cuestiona si existía una verdadera urgencia que justificara la adopción de un decreto-ley en lugar de seguir el proceso legislativo ordinario.
Aprovecha nuestra asistencia especializada para asegurar tu pasaporte hacia un futuro sin fronteras.
¿Qué esperar en los próximos 60 días?
El decreto debe ser aprobado por el Parlamento italiano en un plazo de 60 días desde su publicación. Durante este período, pueden presentarse enmiendas o incluso rechazar el decreto.
Además, se espera que la Corte Constitucional evalúe su constitucionalidad, especialmente en lo que respecta a la retroactividad y los derechos adquiridos.
Posición de io.europeo
En io.europeo, estamos comprometidos con la defensa de los derechos de los ítalo-descendientes. Nuestro equipo sigue de cerca la evolución del decreto y está preparado para actuar legalmente, si es necesario.
Mantenemos nuestro compromiso de informar de manera responsable y acompañarte en cada paso del proceso de ciudadanía.
Conclusión
El Decreto-Ley 36/2025 representa un cambio significativo en el reconocimiento de la ciudadanía italiana por descendencia. Si bien su objetivo es reducir la carga administrativa y evitar abusos, también plantea preocupaciones sobre la retroactividad y los derechos adquiridos. Es fundamental mantenerse informado y considerar asesoramiento legal si estás en proceso de solicitar la ciudadanía italiana.